¡Porque se trata de una zona arqueológica sin igual en todo el mundo!, ya que en los Guachimontones podrás ver pirámides circulares, ¡sí!, como lo lees, este tipo de estructuras son únicas en todo el planeta y te sorprenderás al verlas en persona.
No solo eso, algunas personas dicen que esta zona irradia una energía especial, por lo cual acuden en varios momentos del año para renovarse; sumado a eso podrás conocer más de una increíble y misteriosa cultura que cultivó en chinampas, manejaron las piedras volcánicas sin igual.
Y, ¿por qué otra razón? ¡Porque la zona arqueológica se encuentra a poco más de una hora de Guadalajara!, muy, muy cerca y cuyo trayecto es simple, además puedes visitar con toda tu familia, con niños pequeños o adultos mayores, todos se sorprenderán de lo que fueron capaces nuestros antepasados.
Porque con tu visita se apoya el cuidado y difusión de esta zona arqueológica que es orgullo para Jalisco y debería ser para todo México…
¡Acompáñanos en este viaje!
¿Cómo llegar a los Guachimontones?
Imaginemos que te encuentras en el Centro Histórico de Guadalajara, para tener una referencia. Si viajas en tu vehículo particular deberás tomar rumbo a Avenida Vallarta, dependiendo de qué punto te incorpores a dicha vialidad podrás ver los Arcos de Guadalajara y la Minerva; otra vía rápida es Lázaro Cárdenas, por donde podrías transitar por el puente Matute Remus.
Seguirás derecho, pasarás Periférico y seguirás por la carretera México 70 o Guadalajara-Tepic, pasarás la Venta del Astillero, La Primavera, el Puento de las Tortugas, seguirás camino hacia Tala y darás vuelta a la derecha en la carretera El Refugio-San Marcos, de allí todo es derecho hasta Teuchitlán.
El acceso a la Zona Arqueológica de los Guachimontones se encuentra señalado en diferentes partes de Teuchitlán, así que no hay pierde; al ingresar por la localidad tendrás que seguir en línea recta por la avenida principal hasta donde tope; allí verás una señal vial indicándote dar vuelta para la derecha, bajas una cuadra, luego a la izquierda y de allí todo derecho hacia la zona arqueológica.
Ahora bien, otra opción es acudir a la Vieja Central Camionera, cerca del Parque Agua Azul en Guadalajara y tomar un camión hacia Teuchitlán, el cual te dejará a ti y tus seres queridos a la entrada de nuestra localidad; allí tienes la opción de pedir un taxi hacia la Zona Arqueológica de los Guachimontones o incluso montar a caballo, ya que hay personas que rentan equinos para dicho trayecto; también puedes caminar, solo considera que es de subida para ver las pirámides.
Encontrarás un módulo de información donde pagarás una cuota mínima de recuperación, a tu mano izquierda encontrarás el estacionamiento, a tu derecha hay un local donde puedes adquirir artesanías y también sombreros por si olvidaste el tuyo; créenos, lo vas a necesitar.
¿Qué hacer en los Guachimontones?
Algo que te recuerdan constantemente los guías de nuestra zona arqueológica es que te sientas como en casa y por lo mismo la cuides; una vez que llegues tienes dos opciones, puedes comenzar tu recorrido visitando el Centro Interpretativo Guachimontones “Phil Weigand” o visitar primero las pirámides.
En ambos puntos de tu recorrido encontrarás amables y apasionados guías que te relatarán sus conocimientos de la cultura e historia de la zona; nosotros te podríamos recomendar iniciar primero por las pirámides y después ir al Centro Interpretativo que completará tu experiencia pues conocerás más sobre lo que lograron nuestros antepasados.
Para ir a las pirámides, del módulo de información de la entrada, deberás tomar a la izquierda, hay un camino para vehículos, pero el cual solo es usado para transportar a personas que así lo necesitan, no hay estacionamiento arriba, así que tendrás que regresar.
En tu camino notarás a mano izquierda el primer juego de pelota de la zona, en diferentes puntos encontrarás placas informativas que te explicarán en qué punto te encuentras y cómo interpretar lo que estás viendo.
Ya en la cúspide tendrás una vista increíble, hay flechas en el piso para guiarte, además que puedes seguir a uno de los guías, quienes visten uniforme en color verde; recuerda seguir sus recomendaciones en todo momento y respetar las estructuras que están rodeadas con soga, esto quiere decir que no puedes subir en ellas; el resto puedes transitar libremente, siempre con cuidado.
El recorrido en esta parte culmina al subir a la pirámide más alta, desde allí apreciarás el talento de nuestros ancestros en la construcción y el fenómeno de amplitud al hablar o aplaudir que sucede en la punta; además que tendrás una vista maravillosa hacia las pirámides y en el fondo la Presa de La Vega.
En el Centro Interpretativo tendrás la oportunidad de contemplar piezas originales, un impresionante mural, el cual te será explicado por el personal del lugar. Cada cierto tiempo se proyecta un video en el auditorio del centro, el cual reforzará lo que viste en las pirámides, en el mural y lograrás entender más lo increíble que resultan los Guachimontones, no solo para la región o el estado, sino para todo México.
El video te explicará también el trabajo del arqueólogo norteamericano Phillip Clayton Weigand Moore, a quien se le atribuye el cuidado y difusión de la Zona Arqueológica de los Guachimontones, junto a su esposa Acelia García Anguino.
Si quieres conocer más del trabajo de Weigand te invitamos a que visites nuestra entrada de blog: Guachimontones: La otra historia de Mesoamérica.
¿Dónde se puede comer después de visitar los Guachimontones?
A contados metros de la Zona Arqueológica de los Guachimontones y de Teuchitlán se encuentra la Presa de La Vega, allí existe un corredor gastronómico donde encontrarás una amplia variedad de propuestas de platillos; esta región es famosa por las ancas de rana, las cuales, según los pobladores, es de las comidas típicas más ricas y que se asemeja en sabor y presentación al pollo.
Los mariscos son el fuerte de la zona, así que puedes degustar diferentes pescados, cocteles y más; también hay ofertas para los más pequeños como pizza a la leña y tacos.
A contados metros de la entrada a los Guachimontones encontrarás establecimientos de bebidas de base prehispánica, lo que complementará perfecto este viaje por nuestro pasado glorioso; algunas son alcohólicas, por lo cual no está de más la moderación, sobre todo si regresarás manejando hacia Guadalajara.
Para finalizar tu travesía por los Guachimontones, puedes hospedarte en algunos de los hostales de Teuchitlán o regresar a la Perla Tapatía; el trayecto es igual de sencillo, solo respeta los señalamientos y los límites de velocidad.
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